El ejercicio físico y la adecuada hidratación ocupan la base de la nueva pirámide nutricional presentada en 2017 por la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria. Ambos elementos forman parte de los que se conocen como «estilos de vida saludables» y constituyen los pilares esenciales de una alimentación saludable.
En efecto, la famosa y conocida por todos pirámide de los alimentos en la que se representan las prioridades nutricionales y la composición de una dieta sana destaca tres pilares indispensables para tu buena salud: la nutrición, la actividad física y la ingesta de suficiente agua. ¿Por qué son fundamentales estos tres elementos? Te lo contaremos a continuación.
Treinta minutos al día de actividad física marcan la diferencia. Caminata, natación, gimnasia aeróbica, running, pilates… tienes un sinfín de opciones entre las que elegir. Lo que verdaderamente importa es que, una vez al día, tu cuerpo se mueva, queme calorías y gane fuerza y vitalidad. De esta manera, el corazón se exige y se vigoriza. Los músculos se tonifican. Las articulaciones se lubrican y se fortalecen. Los beneficios de mantener el cuerpo en movimiento son incalculables.
Procura siempre hacerte un hueco en la agenda para ello porque de eso depende, en gran parte, tu buena salud. Además, la práctica frecuente de ejercicio levanta el ánimo y actúa como un auténtico antidepresivo natural. Por último, un dato importante: para un mayor rendimiento, recuerda beber suficiente agua.
Nadie puede vivir más de cinco días sin beber agua. La ingesta de líquido en forma de agua garantiza el correcto funcionamiento del cuerpo en general y del cerebro en particular. ¿Cuánta agua se recomienda beber al día? «Hidratación adecuada», según la Organización Mundial de la Salud, es sinónimo de al menos dos litros de agua al día (algo más para el sexo masculino). Si es de agua mineral, mucho mejor. Por ello, si puedes elegir, procura consumir un agua mineral natural segura, como Font S’Aritja, que resulta efectiva y rápida hidratación.
Hay algo importante que has de saber a propósito del agua: no se trata de un complemento más de una dieta sana; hoy se sabe que es un elemento esencial de una alimentación saludable, sin el cual el ser humano no puede gozar de una buena salud.
Vida sana y alimentación saludable están estrechamente vinculadas. La clave está en llevar una dieta variada en calidad de alimentos, diferentes texturas y amplia gama de colores. Cuida las proporciones: todos los alimentos son necesarios, pero en su justa dosis. La mejor guía que permite visualizar, de manera rápida, qué alimentos conviene elegir es, como no podía ser de otro modo, la pirámide nutricional. Hazte con ella e intenta que en tus comidas diarias no falte ningún elemento considerado importante. Frutas y verduras, sin duda, son fundamentales.
Se dice que la mejor farmacia es una verdulería, justamente porque allí se venden los alimentos indispensables para no enfermar. Ya lo dijo Hipócrates: sea el alimento tu medicina y sea tu medicina tu alimento. Eso sí, recuerda evitar el exceso de azúcares, embutidos, los enlatados con alto contenido de sodio, los congelados y productos alimenticios precocinados. Reemplázalos por productos frescos (carnes, frutas y verduras de temporada), legumbres, cereales y lácteos de buena calidad.
Desde el Importaco te animamos a apostar por estos tres elementos clave para mantener una buena salud. Por tu parte, procura no descuidar ninguno de ellos y continuar con tu estilo de vida saludable. Tu cerebro y tu cuerpo se mantendrán activos gracias a tu fuerza de voluntad. Valdrá la pena el esfuerzo, ya verás.