El agua mineral natural es un componente imprescindible para toda la familia. Desde los bebés, a los que al llegar a una determinada edad se les debe empezar a proporcionar agua, pasando por los niños, adolescentes, jóvenes, adultos y personas mayores. El consumo de agua es, de hecho, uno de los hábitos más saludables, pues garantiza el correcto funcionamiento de todos los sistemas de nuestro organismo.
Durante el embarazo y la lactancia es de vital importancia mantener el cuerpo hidratado. Llevar una botella de agua mineral natural siempre encima y a mano es una buena opción para garantizar la hidratación de nuestro cuerpo y del bebé.
Posteriormente, cuando el niño o la niña crece y empieza a concienciarse sobre sus necesidades y sobre su propio entorno, es necesario educarle en el hábito del consumo de agua, incluso cuando no esté en casa. Proporcionarle diariamente una botella de agua para que pueda llevarla consigo es una buena iniciativa para que no olvide este hábito, ni siquiera cuando se encuentre en el colegio o haciendo deporte.
Los niños deben beber la misma cantidad de agua que los adultos en proporción a su tamaño. Es decir, cuando un niño tiene dos años no debe beber la misma cantidad de agua que cuando tiene ocho. Del mismo modo, cuanto tiene ocho años no beberá la misma cantidad que un adulto, sino que a medida que va creciendo y va aumentando su peso y su estatura tendrá que ir adaptando la cantidad de agua que deberá ingerir diariamente.
Cuando llegue a un peso determinado o a una edad determinada (que suele ser alrededor de los 18 años) es cuando se recomienda beber dos litros de agua al día.
– Hasta los 5 años aproximadamente, será necesario que sean los familiares quienes estén pendientes de la hidratación de los niños.
– Posteriormente, hasta los ocho años, llega un período importante en el que deben aprender que el agua es muy importante para su salud. Si les ayudamos a crear el hábito de beber a menudo, los niños son más conscientes de que tienen que incrementar la cantidad de agua que ingieren diariamente debido a sus necesidades y su cansancio físico después de las actividades que realizan.
– Durante la adolescencia se consumen mayor cantidad de refrescos. Por lo que tener el hábito de beber agua con frecuencia desde la infancia contribuirá a mantener un buen equilibrio entre el consumo de ambas bebidas.
– Para los adultos es necesario consumir alrededor de los dos litros diarios de agua, algo que permitirá sentirse mejor en todos los sentidos. Son muchas las formas que existen de ayudarnos a ingerir esta cantidad de agua, que son, aproximadamente, ocho vasos de agua.
– Es cuanto se llega a una edad más avanzada, las personas mayores tienen tendencia a olvidar beber agua, ya que no realizan tantas actividades intensivas como para cansarse mucho y por ello pierden la necesidad de beber agua, ya que prácticamente muy pocas veces sienten sed. En estos casos, las personas que estén a su alrededor deberán ayudarles a que tengan siempre cerca una botella de agua y se vayan sirviendo durante todo el día.
Es en todas las edades de la vida cuando se necesita beber agua, pero en algunas especialmente se necesita de alguien que les recuerde que deben seguir haciéndolo. Por ello en Importaco podemos encontrar una amplia variedad de botellas de agua que podemos tener siempre a mano, utilizar en la mesa o llevarlas siempre con nosotros.