Vuelta al trabajo con actitud positiva

Trabajo y positividad son dos términos que muchas veces parecen enfrentados. De hecho, solemos identificar el trabajo como una tarea tediosa a la que estamos obligados, incluso cuando nos gusta. No siempre es fácil estar motivados.

Es una lástima. Pasamos buena parte de nuestra vida trabajando. Por lo tanto, ¿por qué no esforzarse en mejorar nuestra relación con el oficio? Si pudiéramos convertir tanto tiempo trabajando en algo que nos haga sentir bien, ¿acaso no ganaríamos en calidad de vida emocional? Merece la pena intentarlo.

¿Cómo ser más positivos con el trabajo?

Ser más positivos puede ser algo innato. Pero también es posible «entrenar» nuestras emociones y puntos de vista para desarrollar esa maravillosa capacidad. Si vemos las cosas con algo más de luz, podemos ser más felices y sacar todo nuestro potencial. ¿Cómo conseguirlo?

Crea tu espacio

No siempre podemos definir cómo es nuestro espacio de trabajo, pero seguramente podrás adecentarlo de alguna manera que te traiga bienestar.

No deberías dejar que la mesa de la oficina sea un desastre. Mantén limpia tu taquilla. Evita el desorden y atrévete a añadir un toque decorativo que te pertenezca. Deberías evitar el ambiente gris y la acumulación de material. Deja que corra el aire.

Esto también debería extenderse a las costumbres: busca la comodidad, descansa cuando puedas, relaja la vista, levántate de vez en cuando, estírate… Y aliméntate bien. Si comes en el trabajo, no dejes que la rutina afecte a tu salud. Prepara platos sencillos y ricos que puedas llevar en una fiambrera, lleva fruta fresca y, por supuesto, bebe agua mineral.

La deshidratación causa cansancio, pérdida de concentración, mal humor, etc. Te hará rendir menos. Eso afectará a la calidad de tu trabajo y, por lo tanto, a cómo de positiva ves tu tarea y tu rutina diaria. Evítalo llevando siempre al trabajo una botella de agua mineral como la de Agua de Cortes de Bebidas Naturales.

Encontrar cada día un lugar de trabajo más personal hace que se acerque a lo que consideramos agradable e incluso hogareño. Pasamos mucho tiempo en él, ¿por qué no convertirlo en un lugar cómodo y amigable?

Busca la excelencia

No dejes que la rutina y lo mecánico inunden tu labor. Para ir al trabajo motivados es importante plantearse retos. Tomar la decisión de mejorar la calidad de nuestro trabajo es una de las mejores formas de poner más atención y alejar la negatividad.

Intentar conseguir el reto nos motiva. Superarlo y ver que aumenta la calidad de lo que hacemos le da un nuevo sentido a la jornada. De pronto descubrimos el valor de nuestra tarea y encontramos que todo tiene un sentido.

Cumple con los compañeros

El entorno de trabajo es un espacio social. Incluso cuando el trabajo es solitario tenemos que relacionarnos con los demás, ya sea por teléfono, correo electrónico o videoconferencia.

No deberíamos dejar que el espacio de trabajo sea una zona de guerra o mal ambiente. Las buenas relaciones a veces surgen sin más, pero también pueden construirse proactivamente.

El objetivo es sentirse mejor, tener ganas de relacionarse, de sonreírse y verse las caras cada día. Las buenas relaciones crean un ambiente optimista que hace que vayas a trabajar con actitud positiva.

Consíguelo actuando con cordialidad, cumpliendo con tus tareas, siendo amable, puntual y de confianza. Que se note que eres un pilar para la empresa y que se puede contar contigo para las alegrías y para las preocupaciones. Sentirse valorado no solo depende de la calidad de tu trabajo, también influye tu propia actitud. Y cuando te sientes valorado, vas a trabajar con ganas y una sonrisa.

En Importaco queremos motivarte para que trabajo y positividad vayan de la mano. ¡Lleva siempre una botella de agua mineral!

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