Turismo rural en la sierra de Tramuntana

Los primeros turistas llegaron a Mallorca a principios del siglo XX, enamorados de la sierra de Tramuntana. Y hoy, a principios del XXI, muchos visitantes toman el relevo y continúan la senda del asombro ante la naturaleza que aquí se nos presenta. Mismo espacio, mismo paisaje. Diferentes personas, pero la misma mirada.

Si te planteas unos días de descanso y desconexión, el turismo rural en Tramuntana puede ser la mejor elección para ti. No en vano, la sierra de Tramuntana fue declarada Patrimonio Mundial por la Unesco. En ella podrás disfrutar de la quietud de la vida rural y silvestre y no te faltarán oportunidades de ocio tranquilo. ¿Te apetece? Acompáñanos en este viaje.

Turismo rural en la Tramuntana

Las mencionadas oportunidades de ocio tranquilo están más que garantizadas por los 90 kilómetros de longitud de la sierra, dispuestos como una orgullosa muralla frente al mar del noroeste de Mallorca. En este espacio encontrarás multitud de casas rurales en las que hacer de la montaña un hogar, muchos senderos que recorrer y no pocas ocasiones para degustar la gastronomía local.

Y también, por supuesto, tendrás la oportunidad de comprender la importancia del agua en esta sierra. Sigue viva la herencia de viejos molinos, acequias, cisternas y terrazas, estructuras que aprovecharon el agua en el pasado y que hoy forman parte del paisaje tanto como los barrancos y los bosques. Ese legado sigue vigente en las excepcionales aguas minerales de Font Teix y Font s’Aritja. De aquí brotan tras una paciente espera en el corazón de la montaña.

Sendas para el turismo rural en la sierra

Playa o montaña. Ambas opciones son válidas y no excluyentes. La visión del mar te relajará tanto paseando por la arena como observando el horizonte desde las alturas. Ahora bien, ¿cómo recorrer estas sendas y encontrar miradores, calas perdidas y pueblos con encanto? No faltan rutas de senderismo por las que pasear.

Ya solo con elegir la llamada Ruta de piedra en seco dispondremos de 167 km de caminos señalizados entre Deià y Pollença. En esta ruta conoceremos la historia y el patrimonio de la Tramuntana, gozaremos de sus paisajes, conoceremos sus tradiciones y, por supuesto, nos quedaremos siempre con ganas de más. Porque esos 167 km dan para mucho y recorrerlos es un reto que te exigirá muchas visitas a este paraje de ensueño. ¿Hace falta un mejor pretexto para volver?

Para aligerar la marcha y verlo todo desde otro punto de vista, la ruta en el tren de Sóller se descubre como la más inesperada y romántica. Si llegas a Mallorca en Palma, podrás tomar este viejo tren de madera que ya transportaba hasta la Tramuntana a los primeros turistas que mencionábamos arriba. Un recorrido donde el traqueteo nos introduce en la sierra a través de túneles, puentes y curvas y más curvas en ascenso.

No pocos de estos caminos desembocarán en calas. La calidad de estas playas es mundialmente conocida: de aguas cristalinas, de color turquesa, muchas veces solitarias y enmarcadas entre riscos y acantilados. La sierra se asoma al mar con brusquedad, pero en sus ensenadas da la oportunidad de disfrutar del sol y de un baño envidiable.

Sosiego, paseo, paisaje, actividades al aire libre, deportes de aventura, cultura, gastronomía, sol y baño. En definitiva, la sierra de Tramuntana es un destino perfecto para disfrutar de manera saludable, llenarse los pulmones de brisa marina y aire de montaña y relajar las tensiones. En Importaco recomendamos conocer el hogar del que se obtienen nuestras aguas minerales, pero si tus vacaciones todavía están lejos, no te preocupes: empieza por llevarlas a tu casa. ¡Bebe agua mineral de la Tramuntana!

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