Natación: agua y deporte
El agua y el deporte tienen una relación estrecha nunca suficientemente recordada. Durante el ejercicio aumenta la pérdida de agua corporal, tanto por la sudoración como para mantener el metabolismo en funcionamiento. Por eso, la hidratación es fundamental para el rendimiento deportivo, pero también para la simple supervivencia. ¿Qué cantidad de agua mineral debe beber un nadador? ¿Por qué es tan importante hidratarse en la piscina?
La natación y el consumo de agua
En los deportes acuáticos se subestima el efecto de la deshidratación más que en los demás. Cuando hacemos deporte «de tierra» percibimos perfectamente el calor y la pérdida de agua por nuestros poros, por lo que no dudamos en beber. Pero cuando practicamos natación no somos conscientes de que nuestro cuerpo está deshidratándose. Sin embargo, lo hemos hecho tanto como con otros deportes intensos. De hecho, el calor de la piscina podría incrementar la sudoración.
La deshidratación aparece muy rápido y sus efectos afectan a todos los sistemas del cuerpo. El agua está implicada directa o indirectamente en todos los procesos metabólicos, por lo que su carencia altera significativamente las funciones corporales y el rendimiento deportivo.
Para estar deshidratados no hace falta perder grandes cantidades de agua: el rendimiento se reduce un 10-20 % con solo un 2 % de pérdida del peso corporal. Aumenta la temperatura corporal y la presión arterial, se altera el funcionamiento del sistema nervioso central, se producen pérdidas sensoriales y cognitivas, aparecen calambres, mareos, náuseas, etc. En poco tiempo, el nadador podría sentir los peligrosos efectos de la deshidratación, que deben corregirse de inmediato.
Agua mineral para la natación
Como deportista, es importante hidratarse. Como nadador, se tiene que prestar especial atención y no autoengañarte, porque el ejercicio deshidrata dentro y fuera del agua. En este sentido, puedes incorporar pautas en tu rutina de entrenamiento y competición que te permitan mantener el ritmo y la salud.
Todo pasa por consumir más agua mineral como Agua de Cortes. Es necesario beber con mayor frecuencia y sin esperar a sentir la sed. Esta es una señal del organismo como consecuencia de la deshidratación.
¿Cómo y cuánto beber? Deberías seguir estas pautas:
– Prevenir. La correcta hidratación empieza mucho antes de lanzarse a la piscina. Bebe varios vasos de agua mineral a lo largo del día. Asegúrate de beber uno más media hora antes de empezar el ejercicio.
– Tener agua a mano. Deja una botella de agua mineral en el borde de la piscina, de modo que siempre la tengas a mano sin necesidad de salir del agua. Bebe 100-200 ml cada quince minutos, tengas o no sed. Si nadas en el mar, conviene que lleves bebida en el traje de neopreno o en una boya de natación. Si te acompañas de una barca de avituallamiento, que siempre haya agua mineral en ella.
– Reponer líquidos. La hidratación debe seguir una vez acabado el ejercicio. Media hora después de terminar la rutina de entrenamiento o la competición, bebe un vaso de agua mineral.
En el deporte, siempre agua
La deshidratación es peligrosa y muchos deportistas lo han descubierto con malas experiencias. Un repentino golpe de calor, un calambre o un desvanecimiento no solo estropearán una buena marca, también ponen en riesgo la salud.
En Importaco somos conscientes de lo importante que es para los deportistas beber agua mineral. Es necesaria para mantener la actividad, gestionar mejor la energía corporal y moverse mejor. El esfuerzo del entrenamiento no debe estropearse con hábitos inadecuados. El agua es fundamental en este sentido.
Para conseguir las mejores marcas y volver a casa con la salud intacta, nada como llevar al entrenamiento una botella y, por supuesto, acostumbrarse a usarla. Agua y deporte van unidos, así que ¡bebe e hidrátate!