El ciclo del agua: ¿qué es?

El ciclo del agua o ciclo hidrológico es el proceso de constante mutación y continuo desplazamiento del agua en el planeta. Básicamente, y para que lo entiendas muy rápido y fácil, consiste en la transferencia de agua de un sitio a otro distinto.

En el transcurso de ese pasaje, y dependiendo de la etapa que atraviese en ese momento, el agua sufre cambios en su estado físico. Por ejemplo, pasa de líquido a gaseoso (por evaporación), de gaseoso a sólido (por sublimación inversa), de gaseoso a líquido (por condensación)… y así sucesivamente, según las condiciones del ambiente imperantes.

El agua va variando de fase dentro del ciclo y, en el ínterin, conforma océanos, mares, ríos, lagos y lagunas (estado líquido), glaciares y montañas con picos nevados (estado sólido) y también nubes o neblina (estado gaseoso).

Pero vamos al detalle de cada una de las fases de dicho proceso fundamental para la vida.

Etapas del ciclo hidrológico

1. Evaporación

Es el proceso por el que el líquido pasa a su forma gaseosa. Así comienza el ciclo al que hacemos referencia. El sol calienta y aumenta la temperatura de las fuentes de agua: océanos, mares, ríos y lagunas. El agua hecha vapor sube a la atmósfera.

2. Condensación

A continuación, el agua vaporizada en la atmósfera se condensa en forma de gotas concentradas que, a su vez, componen nubes o neblina.

3. Precipitación

En este paso, el agua en estado gaseoso pasa a convertirse en líquido. Es decir, el agua condensada alcanza la superficie en forma de gotas de lluvia. En algunas zonas muy frías del mundo (los polos, por ejemplo), esas gotas que llegan a la tierra pasan directamente de un estado líquido a uno sólido. Justamente, cuando nieva o cae granizo. Mediante un proceso de fusión, esa nieve o granizo mutarán, luego del deshielo, en agua en estado líquido.

4. Infiltración

Tras caer sobre la superficie terrestre en forma de precipitación, el agua penetra en los suelos. Eso es precisamente la infiltración. Gran parte pasa directamente a las aguas subterráneas y otra fracción vuelve a la naturaleza. Gracias a ella las plantas siguen sus ciclos de crecimiento y los animales y el hombre pueden beber agua, que es indudablemente fuente de vida.

A propósito de esta etapa, vale la pena aclarar que el agua que se filtra por una zona y drena hacia otra de menor altitud, brotando entre rocas o directamente de la tierra, forma un manantial. Los manantiales son fuentes naturales de agua dulce. El Agua de Bronchales, marca de Bebidas Naturales, por ejemplo, surge de nuestro manantial ubicado a 1720 m, en la Sierra de Albarracín. Se trata de un ecosistema protegido por un bosque. Como empresa, además, nos responsabilizamos de mantener el perfecto equilibrio acuífero respetando la capacidad de regeneración de esta fuente hídrica natural.

5. Escorrentía

En la etapa final del proceso, el agua se va desplazando por el terreno por rápidos, cascadas, declives, etcétera, para volver a las fuentes hidrológicas (océanos, mares, ríos, lagos y lagunas). Así es como se reinicia un nuevo ciclo del agua que, como advertirás, no culmina nunca.

El ciclo hidrológico, que influye en el clima y en nivel de las fuentes hidrográficas, es primordial para garantizar la continuidad de la vida en planeta Tierra. Desde el Importaco, preservamos su buen funcionamiento. En esta ocasión, nos complace informarte sobre el ciclo del agua para que sepas de dónde proviene el agua mineral natural de manantial que te acompaña cada día en tu mesa. Te animamos a que apuestes por la cultura de la hidratación y por un estilo de vida saludable. Cuenta con nosotros para lo que necesites.

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