Agua, siempre agua. Sea la hora que sea y hagamos lo que hagamos, nunca debe faltarnos agua. Y para asegurarlo existen los distintos formatos de botellas de agua mineral. Los envases de 33 o 50 cl son idóneos para cuando estamos fuera de casa. Pero ¿por qué utilizar garrafas? ¿Cuándo es buena idea comprar y utilizar envases de seis litros o incluso de ocho, que son tan pesados y grandes?
La comodidad de transporte es la ventaja de las botellas de 33 y 50 cl. Por su parte, las de 1 o 2 l nos aportan agua suficiente para varias horas en casa o incluso para todo el día. Estas últimas son las botellas de mesa, las que mejor compañía hacen al almuerzo o la cena.
Pero las botellas de seis u ocho litros no gozan de las ventajas de comodidad y accesibilidad de las anteriores. Son demasiado pesadas para llevarlas a ninguna parte o para servir un vaso (al menos con comodidad). Su boca es demasiado ancha y eso dificulta el servicio o el beber directamente de ella. En definitiva, no es la botella más útil en lo que respecta al acceso, sobre todo si tienen que manejarla niños o personas mayores.
Pero sí tienen sus ventajas. Quizá no sean las botellas más cómodas para el uso individual, pero sí son las botellas que necesitan las familias numerosas. Como verás, los motivos son pura matemática.
A partir de la adolescencia, cada persona debería beber en torno a dos litros de agua al día para mantenerse sana. Eso significa que una familia de cuatro miembros de más de 15 años bebe unos ocho litros diarios en condiciones normales, una cantidad todavía mayor si hacen deporte o si el clima es caluroso y húmedo. Es decir: una familia así consume envases de ocho litros a razón de uno diario.
Una familia de cinco, seis o más miembros consume mucha más agua. Quienes apuestan por el consumo de un agua más pura y limpia, de mineralización débil y sabor fresco y agradable, tienen la elección lógica en el agua mineral como, por ejemplo, el Agua de Cortes. Pero eso implica llevar a casa grandes cantidades de agua, una carga de trabajo innegable.
Por ello, las botellas de agua mineral de gran formato facilitan el acceso al agua. Comprando varias de una vez se puede asegurar el suministro de toda la semana para toda la familia. Lo único que hay que hacer es verter el agua en jarras a la hora de comer, para servir los vasos con mayor comodidad.
Pero ¿por qué comprar una, dos o seis garrafas pudiendo comprar la misma cantidad en botellas de uno o dos litros? Por comodidad. Las botellas menores ocupan más espacio en casa y generan más residuos, lo que dificulta su almacenamiento y eliminación. Cuando hablamos de grandes cantidades, es mejor utilizar garrafas para una mejor conservación del agua.
Por otro lado, las garrafas presentan mejor relación entre el precio y el volumen, lo que a la larga puede resultar en un ahorro significativo. Algo que una familia numerosa, que consume grandes cantidades, no puede sino apreciar de forma muy positiva.
En Importaco sabemos que cada persona y cada momento requieren su tipo de botella. En casa las familias necesitan un suministro de agua mineral constante y, para garantizarlo, los envases de seis litros y los de ocho se convierten en imprescindibles. Más comodidad, mejor almacenamiento, menor cantidad de residuos y cierta ventaja económica explican que las familias numerosas tengan pocas dudas. ¿Sois muchos en casa? ¡Usad las garrafas!